Los mejores consejos para el cuidado de las vajillas y cristalerías

La vajilla y cristalería son los elementos centrales cuando vas a presentar una mesa especial para tus invitados. Por tanto, debes procurar que tengan siempre un aspecto impecable y que luzcan como el primer día.

Por otra parte, la adquisición de una vajilla y cristalería de calidad es una inversión importante que realizas y debes procurar mantenerla siempre en buen estado. Lograr que tu vajilla y la cristalería luzcan siempre impecable y te hagan resaltar como anfitriona no tiene que ser una misión imposible.

Para ayudarte a mantener el menaje de casa y tener una mesa de primera categoría en cualquier ocasión especial, te brindamos los siguientes consejos:

1. Tener un lugar de almacenamiento adecuado

Según tu capacidad de almacenamiento en casa así como la cantidad de invitados que sueles recibir, el tamaño de la vajilla y la cristalería puede variar. Lo más común es elegir juegos de 12 piezas en los distintos tipos de platos y copas.

Por esto, es recomendable que cuentes con una alacena o armario especial para guardar tanto la vajilla como la cristalería. “Esta debería ser cerrada para evitar la entrada de polvo y tener varios compartimientos para ir ordenando las piezas por tamaño”, nos recomiendan desde el portal especializado TuGaveta.com.

Los elementos más pesados como soperas o bandejas, se deberían colocar en los compartimientos inferiores para mayor seguridad. Los platos deben estar separados por tamaño y coloca las piezas de tal forma que tengas fácil acceso cuando necesitas utilizarlas.

2. Limpieza de piezas pintadas y antiguas de la vajilla

Hay muchos juegos de vajilla que suelen traer un ribeteado de oro o ser piezas antiguas que heredaste de la abuela y están pintadas. En estos casos, siempre debes lavar cada una de las piezas a mano a fin de evitar daños en la pintura.

Utiliza detergentes neutros especiales para vajilla así como una esponja suave para limpiar la superficie. Luego aclara con abundante agua, déjalas escurrir para eliminar el exceso de humedad y seca con un paño limpio que no suelte fibras.

3. Elimina la pátina de las piezas de la vajilla

En ocasiones cuando tienes piezas de porcelana muy antiguas o que usas con poca frecuencia, puede ocurrir que la porcelana acumule una pátina amarilla. Esto hace que tu vajilla pierda su buen aspecto y se vea vieja así como poco cuidada.

Para esto, primero elimina los restos de polvo con un paño de microfibras y posteriormente pasa un cepillo de cerdas pequeñas que lo saque de los pequeños agujeros. Luego utiliza una mezcla de agua tibia y limón o una pasta de bicarbonato de sodio y aplícalo sobre la pieza con una esponja suave hasta que el amarillamiento vaya desapareciendo.

4. Mantenimiento especial de las piezas de porcelana

En algunas ocasiones cuando tienes una vajilla de porcelana, es posible observar pequeñas rajaduras en su superficie. Esto también hace que se vea descuidada, por lo que te brindamos un pequeño truco para eliminarlas.

Coloca la pieza en un cazo y vierte leche sobre la misma hasta que la cubra por completo. Luego coloca a fuego muy bajo y deja calentar durante una hora aproximadamente, luego espera que se enfríe y lava la pieza con una mezcla de agua fría, jabón neutro y un pequeño chorro de vinagre blanco. Enjuaga con agua limpia, deja secar y verás que tus piezas lucirán como nuevas.

5. Uso adecuado del lavavajillas

Las vajillas modernas así como la cristalería generalmente son resistentes al uso del lavavajillas, lo cual te ahorra mucho tiempo al momento de lavarlas. No obstante, es conveniente seguir algunos trucos para lograr los mejores resultados.

En el caso de la cristalería elimina los restos de vino u otras bebidas antes de colocar las copas, las cuales debes ordenar por orden de tamaño. Además, utiliza la cantidad adecuada de detergente así como abrillantador y controla la dureza del agua para evitar manchas en platos y copas por la acumulación de cal.

6. Utiliza el jabón adecuado

Cuando vas a lavar tu vajilla y la cristalería se deben utilizar detergentes neutros que tengan ciertas características especiales para lograr mejores resultados. En primer lugar conviene que tenga una alta concentración de tensoactivos que ayuden a desengrasar y eliminar la suciedad con facilidad.

Asimismo, si vives en un sitio con agua de gran dureza, elige aquellos jabones que cuentan con secuestrantes que neutralizan la cal y evitan la formación de manchas. Si lo vas a usar en el lavavajillas, evita que sean jabones que produzcan gran cantidad de espuma que será difícil de eliminar en el lavado.

7. Secado y abrillantamiento de la cristalería y vajilla

Una vez que has lavado tu vajilla y cristalería, debes tomar especial cuidado en el secado para evitar la formación de manchas. Si utilizaste el lavavajillas, luego del ciclo de lavado deja un rato la puerta abierta para eliminar el vapor.

Posteriormente seca cada pieza con cuidado, utilizando un paño limpio y seco de microfibras que no produzca pelusas. Las copas y vasos debes sostenerlos por el pie o la base para ir secando sin dejar huellas en la superficie.

Aunque hay productos que se aplican en el lavavajillas para abrillantar, puedes mejorar el proceso luego del secado. Lo mejor es utilizar un paño de lino ya usado para que esté más suave y frotar con cuidado cada pieza hasta dejarla brillante.

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